El 24 de diciembre en la Catedral de San Felipe, Padre Jaime Ortiz de Lazcano Piquer, presidió la celebración de Noche Buena, en la cual participaron cientos de feligreses que repletaron el principal templo de la Diócesis de San Felipe. Al iniciar esta celebración una familia hizo entrega de una figura del Niño Dios para que el Administrador Apostólico lo entronizara en el pesebre.

En su homilía, el Padre Jaime invitó a todos los presentes a descubrir el maravilloso significado de la Navidad, a dejar que Jesús nos acompañe en nuestra historia de salvación, a comprender que en medio de nuestras debilidades, pecados y defectos, Dios tiene Misericordia de cada uno, esta es la Buena Noticia que se manifiesta en esta noche Santa. “En esta noche celebramos el inmenso amor que Dios nos tiene. Jesús se hace presente como niño indefenso en un pobre pesebre, rodeado de pastores y en medio del desierto, para que veamos su fragilidad y podamos amarlo y protegerlo”.

Al concluir la eucaristía el Administrador Apostólico invito en primer lugar a los niños y luego a todas las familias para que lo acompañaran en procesión al pesebre ubicado en la Plaza de Armas de la ciudad de San Felipe para entronizar la imagen del Niño Dios. Momento que los niños vivieron con profunda alegría y entusiasmo por ser los protagonistas de este especial momento.

Fuente: Comunicaciones San Felipe
San Felipe, 25-12-2018